La identidad digital como punto de partida de la facilitación del cumplimiento.

 La identidad digital se puede interpretar de muchas maneras, pero en esencia tiene el objetivo de hacer que la gestión sea lo suficientemente trazable, por lo que constituye un elemento esencial en el adecuado desenvolvimiento de las operaciones. Los datos que se requieren para que ocurran las transacciones que dan cumplimiento a la Contribución se consignan en la identificación digital del usuario con ese objetivo. 

Según la documentación especializada en este tema que ha sido consultada, la identidad digital se entiende como un sistema donde la identificación, autenticación y autorización de usuarios y operaciones se realizan de forma digital.




El primer vínculo entre el usuario y la OFA se basa en la obtención del Carné de Afiliado y a partir del momento de su adquisición, el usario está en condiciones de elegir los medios y canales digitales de pago de su preferencia para dar cumplimento a las liquidaciones periódicas de forma personal o a través de depositante y de manera presencial o a distancia.

La identificación digital resultante de la inscripción inicial en la OFA ya sea por ventanilla o de forma online, posibilita la ejecución de las actividades con mayor precisión. Permite identificar y autenticar al usuario, simplifica el proceso de vinculación y ofrece una mejor experiencia conforme a que, a partir de su obtención, no se necesita acudir de forma presencial o personal para recibir atención.




Los objetivos y oportunidades que ofrece la identificación digital son los siguientes:

1. Habilita la posibilidad de que el usuario realice sus operaciones por un canal virtual. Esto elimina la necesidad de presencia física, considerando que se verifica la identidad digital de la persona y se simplifica el proceso de vinculación con la OFA.
2. La identificación y
autenticación de una persona se puede realizar de forma automática, simplificando el tiempo de atención y mejorando los niveles de aceptación del servicio.
3. La identificación personal se obtiene de forma digital, facilita las transacciones a través de depositante y garantiza que quede registrada correctamente la titularidad de la operación que tenga lugar.
4. Las operaciones de cada usuario se pueden medir y comprobar, por este o por las autoridades controladoras, a través de la identificación digital, confrontando el estado de cumplimiento en la periodicidad que se requiera. 

A través de la identificación digital se garantiza una forma viable y segura de probar la identidad del usuario para acceder a las facilidades que se ponen a su disposición como contribuyente de la Oficina del Historiador, al propio tiempo que se flexibiliza el diligenciamiento de la liquidaciones periódicas a través de algún depositante, si el usuario lo requiriera.

Con la identificación digital entonces se garantiza una mejoría en la experiencia de los usuarios en cuanto a la interacción con el servicio que reciben, se gana en transparencia, eficiencia y eficacia en la gestión, se reducen posibles errores y se diversifican las formas de liquidación, promoviendo un entorno propicio para el cumplimiento.


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